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Los millennials y gen Z no saben qué hacer con su dinero

En los últimos cinco años han surgido multitud de plataformas de inversión en Estados Unidos, Reino Unido y Asia que están levantando millones de dólares en su camino para convertirse en unicornios (empresas con una valoración de +$1B).

Solo en rondas de financiación de este 2021 tenemos a Wealthsimple (robo-advisor, $610M), Freetrade (trading, £35M), Public (social trading, $220M), BUX (trading, €67M), Albert (personal finance, $100M), Robinhood (trading, $2.4B), StashAway (robo-advisor, $25M) y muchas más.

En España, en torno al 10% de la población invierte en fondos. Siendo la edad media de estos inversores de 47 años y con unos ingresos alrededor de los 50.000€ anuales. La banca de inversión solo atiende a estas personas descuidando por completo a los jóvenes en las edades donde más ahorran. Además, las gestoras asociadas a bancos tramitan aproximadamente el 80% de todo el capital para invertir, relegando el resto a las gestoras independientes.

La falta de cultura financiera es un gran problema en cualquier país. Hoy en día existen multitud de blogs, videos y cursos donde se explica cómo tomar las mejores decisiones financieras. Pero la información está fragmentada y muchas de las fuentes son de dudosa credibilidad, aprovechándose del desconocimiento de las personas para convertir ese contenido en un negocio particular y sin demostración aparente de resultados exitosos.

Estos jóvenes no quieren escuchar a la banca, piensan que solo les intentas “colocar” productos que no están alineados con sus intereses. Tampoco encuentran la manera de tenerlos más engaged y la experiencia digital sigue estando poco desarrollada. Por ejemplo, a la hora de buscar ayuda en la app bancaria se encuentran con secciones anticuadas de listados de fondos o acciones que no les aporta ningún valor. Por otro lado, el sector financiero se está convirtiendo en un oligopolio, se encuentra en una fase de concentración y ahorro en costes. A esto le sumamos que, debido a los tipos actuales, las comisiones por tener dinero depositado son cada vez más altas. En definitiva, han descuidado por completo poner al cliente en el centro de sus decisiones.

La tecnología empodera a estas nuevas generaciones, son la generación DIY (do it yourself), acostumbrados a utilizar plataformas de contenido y sociales que les permitan tomar sus propias decisiones.

En Vesto ayudamos a cualquier persona a rentabilizar su dinero de una manera accesible, divertida, simple y guiada. Vemos la oportunidad en crear la plataforma de inversión referente en Iberoamérica: España, Portugal y Latino América.

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